Conversatorio Festivales de cine y su impacto, un espacio para hablar de industria
Como parte de las actividades que realiza el Festival Internacional de Cine de Morelia, se llevó a cabo en el teatro José Rubén Romero un conversatorio entre representantes de festivales y promotores de cine sobre el impacto que tienen en el desarrollo de la región donde operan.
El panel estuvo integrado por el presidente del FICM, Alejandro Ramírez; la delegada en América Latina del Festival Internacional de Cine de San Sebastián, Andrea Stavenhagen; el director de Cinema Tropical, Carlos Gutiérrez; la directora operativa de Ambulante, Roxana Alejo, y la coordinadora académica de Locarno Industry Academy Internacional, Sandra Gómez.
Alejandro Ramírez dio la bienvenida a los panelistas y contó que el FICM se ha posicionado como un generador de derrama económica en la ciudad durante los 17 años que tiene de existencia: “El FICM atrae turismo a la ciudad, pero lo más importante es que ha cumplido con su misión de apoyar a los nuevos realizadores del cine mexicano y que ahora están ganando premios en otros festivales de todo el mundo”.
Por su parte, Sandra Gómez dijo que en Locarno optaron por aprovechar su infraestructura para crear programas especiales con quienes trabajan en cine: “Vamos a crear un programa especial para cubrir necesidades, así que convocamos a nivel Latinoamérica para elegir a ocho jóvenes que vienen a un taller con nosotros. Empezamos en México con el FICM”.
En su intervención, Roxana Alejo dijo que por medio de Ambulante han visto la necesidad de llevar los documentales a más lugares y resaltó el alcance de sus campañas: “Además de la difusión, otorgamos becas para que se terminen de producir los documentales. Hemos visto que es más fácil que reciban financiamiento. En su momento dimos una beca de posproducción a Presunto culpable, que es el documental más visto en México”.
Luego, Carlos Gutiérrez habló sobre los complejos sistemas de distribución actuales y que él ve la labor de Cinema Tropical como un facilitador: “El problema con el cine es que hemos creado un monstruo de siete cabezas y muchos callejones sin salidas; está fragmentado el proceso de la comercialización del cine, desde los festivales que te piden estrenos mundiales hasta los distribuidores. Sacamos el cine del mundo del cine, así que tenemos festivales todo el año y hemos tenido más películas en cartelera que ningún otro distribuidor en Estados Unidos”.
Al final, Andrea Stavenhagen habló la derrama económica del Festival Internacional de Cine de San Sebastián mediante un estudio económico que el festival realizó en 2012: “Es un evento que llama mucho la atención, con una repercusión mediática nacional e internacional. Su presupuesto es de entre 7 y 8 millones de euros, tiene financiación pública y privada, y esa inversión se multiplica unas siete veces”.