ALFONSO CUARÓN Y LA FÓRMULA SECRETA / AYER MARAVILLA FUI, DE GABRIEL MARIÑO EN EL 15º FICM
AYER MARAVILLA FUI, DE GABRIEL MARIÑO, SE PRESENTÓ EN EL 15° FICM
Ayer maravilla fui, de Gabriel Mariño, se proyectó en la decimoquinta edición del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM), como parte de la Sección de Largometraje Mexicano en competencia.
La narración presenta a un solitario personaje de la Ciudad de México que desliza su existencia cambiando incontrolablemente de cuerpo. Sin saber cuándo cambiará, vive una vida monótona viajando entre cuerpos, los cuales termina abandonando. Su hastío y desesperanza se ven enfrentados al amor que siente por Luisa.
Así comienza una lucha por comunicárselo a través de diferentes rostros y cuerpos hasta, quizá, lograr estar junto a ella a pesar de su condición.
En conferencia de prensa, el cineasta Gabriel Mariño expresó que la finalidad del filme era mostrar una historia moderna en la que converge la fantasía y el realismo. “Teníamos la idea de hacer una fábula moderna y una historia con elementos fantásticos con un personaje que cambia de cuerpo, además había varias detonantes, entre ellos, preguntarnos si nos enamorarnos de la esencia de las personas o del físico”.
Ayer maravilla fui se filmó durante cinco semanas y no existió un guion de por medio, sino un relato que sirvió como guía para los actores Hoze Meléndez y Siouzana Melikian, quienes aseguraron que no tuvieron problemas para conducir sus respectivos personajes hacia el objetivo de la trama.
“Había claridad en lo que teníamos que hacer en cada escena, ensayamos, en el set Gabriel nos decía a dónde debíamos llegar. Me agradó trabajar así porque a veces en el cine pasa algo más técnico”, Siouzana Melikian.
“Teníamos el texto escrito y nos daban toda la libertad para proponer, nunca me sentí en una cuerda floja porque vi la seguridad con la que trabajamos y Gabriel nos contagió su pasión. Es interesante trabajar con una historia para nada realista”, dijo Hoze Meléndez.
Por la tarde, Ayer maravilla fui tuvo una función de gala en la que el público cuestionó brevemente al director acerca de qué lo orilló a crear una historia alejada de los temas convencionales.
“En el cine actual, a veces se narran clichés, temas sexistas, cínicos y homófobicos que me dan mucha pena, sobre todo porque son los primeros con los que el público corre al cine. Ya es momento de darle la espalda a eso y tratar de reflexionar un poco más”.
El cineasta también indicó cual fue su referencia cinematográfica más cercana que lo inspiró a contar una historia de evolución corporal. “Básicamente surge de dos cosas, de mi gusto por la película La invasión de los usurpadores, pues me parece interesante esta idea del cambio de cuerpos. Alguna vez leyendo entrevistas vi una pregunta que decía: ‘¿Qué haría si fueras del otro sexo por un día?’ Y la persona respondió que haría el amor, algo que a mí también me encantaría experimentar… Eso movió mi imaginación y de ahí partimos”.
ALFONSO CUARÓN PRESENTÓ LA FÓRMULA SECRETA, DE RUBÉN GÁMEZ, EN EL 15º FICM
El Invitado Especial del 15º Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM), Alfonso Cuarón, presentó la función especial de La fórmula secreta (1965) de Rubén Gámez.
Esta cinta, con la que el director sonorense redefinió una estética en la cinematografía mexicana de los años sesenta, es considerada por el director de Gravity (2013) como una de las películas más importantes del México de la mitad del siglo pasado.
Surreal, anárquica, un delirio de imágenes, la película examina los efectos culturales y políticos de la influencia extranjera en México, cuestionando la identidad nacional, las estructuras de poder y las creencias religiosas. Es una declaración contra el melodramático cine mexicano de los años sesenta.
“Yo la vi por primera vez cuando estaba en la escuela de cine. Fue una película que me cambió completamente los paradigmas que tenía sobre lo que el cine mexicano puede ser. Es una radiografía, no de México, sino de lo que es ser mexicano”, dijo Cuarón. “Lo que más me gusta de Gámez es la fe profunda que tiene en el cine como un lenguaje que no depende de otros lenguajes, que no depende de la narrativa, no depende de la interpretación, sino que depende de las herramientas mismas del cine. La narración fílmica no es una narración literaria interpretada fílmicamente”.
Además de la directora general del FICM, Daniela Michel y el director de la Cineteca Nacional, Alejandro Pelayo, estuvieron en la presentación los directores Carlos Reygadas y Amat Escalante. Su presencia tuvo un propósito: evidenciar la influencia que La fórmula secreta tuvo sobre la obra de estos realizadores mexicanos.
“Es muy difícil encontrar referencias a La fórmula secreta en el cine mexicano, sólo recuerdo dos cineastas que tienen alguna similitud, y los dos están aquí: uno es Carlos Reygadas y el otro está junto a él, Amat Escalante. Yo creo que son los cineastas que más han aprendido a hablar de lo que es ser mexicano de esta manera cargada de simbolismos”.
Al respecto, Amat Escalante detalló algunos aspectos de su obra en los que puede reconocerse esa influencia. “Por ejemplo, cuando estaba haciendo casting para Los bastardos (2008), esa era mi prioridad: más que ver si se podía memorizar las cosas o qué tan bien actuaban, me fijaba en las cicatrices o la piel quemada”.
Por su parte, Carlos Reygadas dio una breve explicación teórica acerca del estilo de la película: “Le dije a Alfonso que la película, para mí, era un ejercicio eisensteniano y él me dijo que le parecía más vertoviano. Ahora que la veo por supuesto que noto el ladovertoviano, con este tema de la cámara que se mueve. Pero yo insisto mucho en el tema del montaje de Eisenstein y me remite también a cosas anteriores como el efecto Kuleshov, el tema de la interrelación de las imágenes y la generación de sentido a partir de ellas, también los elementos que se van cruzando y generando sentido. Todo esto siempre me ha interesado en el cine desde antes de hacer películas. Y algo que sí veo muyvertoviano, que no se hace en el cine de hoy, es la idea de que el cuadro sí puede ser significante en un momento dado, no sólo es el lugar en el que ocurren las cosas, sino que tiene vida propia. Es un elemento que yo utilicé en Japón (2003) con los personajes que salen y entran al cuadro y que se separan y reencuentran”.