Noticias

POESÍA MEXICANA.

 

 

 

 

 

 

 

Por Gerardo Miranda

 

tratado de sonambulismo para hombres verticales

 

I

 

imagine un largo camino

imagínese entonces a usted transitando ese camino     y las rocas     y las flores

algo así como un vagón de metro en hora pico entre sudores

imagine pues     a las muchachas de faldas y blusa cortas

porque hace calor     y el calor las obliga a tales desmesuras

(benditas desmesuras y benditas las muchachas   y bendito el calor que las rodea)

 

imagine pues el viaje     el viaje que usted realiza pero sin usted

es decir     que usted parte antes     y su usted     lo deja relegado así nomás por el camino

como si usted mismo se molestara     a veces     de lo que usted mismo se dice

pero nada de eso es cierto

usted mismo puede verlo     porque en el terreno de lo onírico

las muchachas no padecen las inclemencias del tiempo

algo así como un vagón de metro en hora pico     ya que los vagones de metro siempre llegan a

destiempo

 

y sin embargo     a usted le dan ganas de quemar cosas

de producir el calor necesario para despertarse de su propio sueño

del sueño que usted experimenta     pero sin usted

y aunque fedro     en el banquete     insista en que sólo los amantes saben morir el uno por el otro

usted no está dispuesto ni a sacrificarse     ni a despertar de su propio sueño

sin la certeza del que siente la lumbre rosar la dermis y quemar los vellos

 

y usted huirá rápido como el acorde de un pianista ebrio     tán tán y se acabó

y hará frío en ese momento     y temblará   y lloverá     y eso usted lo sabe

como sabe que el frío sucumbe ante las llamas     eso también lo sabe y no lo niega

 

y puede usted mirarse desde sus desgracias     desde arriba hacia el cielo o hacia abajo

como que El sueño de la razón produce monstruos     o los monstruos de la razón producen sueño

pero el sueño no produce razones     como los monstruos no producen fuego

como a veces la cacofonía del silencio que nos duerme produce sueño     y el sueño espanto

 

apéndice

 

debo haber escuchado aquella noche el trino de los pájaros que no lo son

y aunque la velocidad     tanto del día como de las noches sea variable

la vigilia y el sueño     a cualquier hora despluma a los pájaros que no lo son

diseca su canto sílaba por sílaba hasta dejarlos sin armas

y los pájaros que no lo son

suelen     las más de las veces     ser

aunque sólo por poco tiempo     pájaros reales

 

Gerardo Miranda es poeta y narrador. Licenciado en ciencias humanas con diplomado en filosofía por el Centro Universitario de Integración Humanística.

 

Comentarios desactivados en POESÍA MEXICANA.